miércoles, 3 de abril de 2013

Boletín No. 8 Caso Genocidio


LA VIOLACIÓN SEXUAL ES GENOCIDIO
                                      SU VERDAD ES NUESTRA VERDAD

“Tenía 12 años me llevaron al destacamento con otras mujeres allí me
amarraron los pies y las manos …me pusieron un trapo en la boca…y me
empezaron a violar…yo ya ni sabía cuántos pasaron…perdí la conciencia…y ya
la sangre solo corría…..luego ya no podía ni levantarme ni orinar…”

Este testimonio desgarrador dado hoy por una mujer ixil sobreviviente de
violación sexual, muestra cómo, durante el gobierno del General Ríos
Montt,
se utilizó la violación sexual con el fin de destruir y/o causar lesiones
graves contra las mujeres mayas ixiles, siendo esta práctica parte de la
política genocida del gobierno.

Afirmamos que los hechos de violación sexual ejercidos en contra de las
mujeres mayas ixiles son constitutivos del delito de genocidio porque así
está establecido en el art.376 numeral 2 del Código Penal Guatemalteco:
“Art. 376.-  Comete delito de genocidio quien, con el propósito de
destruir
total o parcialmente un grupo nacional, étnico o religioso, efectuare
cualquiera de los siguientes hechos: 2°. Lesión que afecte gravemente la
integridad física o mental de miembros del grupo.

Los testimonios de las 10 mujeres ixiles que hoy se han escuchado
mostraron con claridad, y sin lugar a dudas como los actos de violación
sexual cometidos durante el conflicto armado en contra de las mujeres
ixiles tenían el propósito de causar daños irreparables en sus cuerpos y
en
sus vidas.  Se trataba de un ejercicio de demostración de poder y de odio
que se materializó a través de sus cuerpos y su absoluta degradación y
humillación. Todo ello respaldado por un sistema ideológico racista y
patriarcal dónde los cuerpos de las mujeres se convirtieron en “cosas” sin
ningún valor. “Agarraron a mi mamá y la arrastraban como a un chucho….”. “
Acaso éramos unos animales para que nos hicieran cualquier cosa”

La política contrainsurgente se propuso causar terror en la población y
específicamente en las mujeres utilizando formas crueles y extremas de
violencia sexual que causaron lesiones graves y permanentes en la
integridad física y/o mental de las mujeres ixiles. El ensañamiento y la
alevosía que se ejercieron contra los cuerpos de las mujeres muestran ese
propósito, incluyendo mujeres embarazadas tal y como lo muestra este
testimonio: “Ellos querían que fuera su mujer pero yo no me dejaba pero
ellos me cortaron la cabeza y así fue cuando me dejé….Yo tenía 6 meses de
embarazo y a los quince días nació mi bebe muerto…”.

Estos daños causados tuvieron efectos en las mujeres ixiles que se
muestran hasta el día de hoy a través de sentimientos de profunda
tristeza,
de culpa, de miedo junto con distintos dolores físicos,  enfermedades como
relataron las mujeres hoy en sus testimonios: “ Me siento muy triste,
siempre estoy enferma y no salgo de la casa…me duele mi corazón”.

Uno de los dolores más marcados que las mujeres relataron durante el día
de hoy fueron las violaciones que ellas presenciaron de sus mamás o bien
de
sus hijas.  Estos hechos se repitieron en numerosos testimonios mostrando
así la intención de destruir y/o lesionar profundamente el tejido familiar
siendo las mujeres el centro del ataque. “Yo también vi cómo a mi hija la
violaron muchos soldados, ella sólo tenía 12 años, la agarraron en mi
cama…”. “ Eran cuatro soldados quienes violaron a mi hija, la golpeaban
muy
duro y ella no paraba de llorar”.

También se pudo comprobar que muchas mujeres que fueron violadas quedaron
brutalmente lastimadas para concebir hijos e hijas, teniendo como
consecuencia la limitación de la reproducción del pueblo ixil. Otros
testimonios también dieron cuenta de las  secuelas físicas en las
capacidades reproductivas como relata una de las mujeres testigas de 46
años. “Tengo una infección en el vientre, me duele todo el tiempo mi
matriz…”.

Como concluye Elizabeth Odio Benito, vicepresidenta del Tribunal Penal
Internacional para ex Yugoslavia (1993-95): “La violación de las mujeres
no
es una consecuencia, más o menos inevitable o intrascendente de un
conflicto armado, sino que es una política aplicada sistemáticamente para
destruir grupos humanos además de la propia víctima directa”.

Los testimonios de las mujeres ixiles que hoy fueron presentados ante el
Tribunal demuestran que los hechos de violación sexual ocurridos en el
área
ixil durante el período del General Ríos Montt tenían un “modus” operandi”
ya que:

       Eran actos que respondían a órdenes de mandos superiores, normalmente
tenientes, quienes daban directamente las instrucciones a los soldados,
además de participar ellos mismos en los actos de violencia sexual. “ Era
un sargento quién daba las órdenes a los soldados”
       Los elementos del ejército y patrulleros llegaban a las comunidades,
separaban a las mujeres y a los hombres, normalmente a las mujeres las
llevaban a las capillas, escuelas, en la misma calle y en ocasiones, a sus
casas. Una vez realizada esta separación procedían a ejecutar diferentes
actos de violencia sexual, siendo la mayoría de las veces, la violación
sexual la práctica generalizada. “Nos agarraron y nos llevaron a un cuarto
del salón parroquial y allí nos violaron a un grupo de mujeres, fueron
varios soldados los que me usaron y me quedé casi un año con hemorragia…”
       Carácter masivo de las violaciones sexuales, es decir, numerosos
soldados y muchas mujeres como víctimas, también se producían violaciones
múltiples, diferentes hombres violaban a la misma mujer y en muchos casos,
fueron repetidas en diversos momentos contra las mismas mujeres. “Nos
llevaron al destacamento y allí nos violaban muchos soldados, yo estuve
diez días y me violaron muchas veces y a otras mujeres también”.
“Abusaron
de mí toda la noche fueron como 20 soldados pero al final perdí la
conciencia”.

Todas estas características muestran que la violación sexual era una
práctica premeditada, sistemática, generalizada y que tenía como fin
destruir y lesionar gravemente a las mujeres ixiles como grupo específico.
No eran actos cometidos por la tropa fuera de control de sus mandos, sino
que éstos ordenaban, aprobaban y legitimaban dichos actos. Los victimarios
eran personas comunes, no eran maniáticos, ni sufrían de ninguna
patología.

Uno de los momentos más memorables fue cuando una mujer sobreviviente ixil
dijo con voz clara y fuerte como había escuchado a un soldado decir” Ríos
Montt nos dijo que se acabara con toda esa basura ixil porque colaboran
con
la guerrilla”.

También se pudo evidenciar la práctica recurrente de someter a las mujeres
al régimen de servidumbre sexual donde los soldados violaban durante días
seguidos a las mujeres y obligaban a cocinarles y atenderles bajo amenazas
de muerte y violencias continuas. “Me acuchillaron y tengo cicatrices,
cuando me violaban ya no podía caminar y me tiraban como una pelota….Yo
tenía que cocinar para ellos para que no me mataran.”

Estos diez testimonios de las mujeres ixiles presentados hoy en la Corte
son diez actos de valentía, de fuerza y de poder de las mujeres. Hoy las
mujeres han roto una vez más el muro del silencio que existe en Guatemala
en torno a la violación sexual que se ejerció contra las mujeres ixiles, y
otras miles de mujeres mayas, mestizas y garífunas en la época del
conflicto armado guatemalteco. Como bien dijo una de las mujeres al
finalizar su testimonio, “Hoy va a haber un cambio en mi vida porque me
estoy desahogando”.

Hoy estas mujeres han traído ante nosotras y nosotros su voz, su corazón,
su memoria, su cuerpo, su dolor y sobre todo su verdad para decir que sí
fueron violadas y que quieren justicia por lo que les pasó y que no
quieren
que esto se vuelva a repetir. “Vengo a decirlo para que no vuelva a
suceder
a nosotras las mujeres”

Guatemala 2 de abril 2013.

Asociación para la Justicia y Reconciliación  AJR
Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos CALDH
Colectivo Nosotras las Mujeres
Centro Medios Independientes




www.paraqueseconozca.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La justicia en Guatemala, bajo reserva

Foto: Simón A. Ramón.   ENTREVISTA CON LA ABOGADA MAYA K’ICH’E JOVITA TZUL.  Desde finales de abril, hay dos presos políticos más en Guatema...