"La risa, es la distancia más corta que existe entre dos personas", dice Dennis Castellan -Doctor Narinas- miembro de la Asociación Fabrica de Sonrisas. Agrupación que se funda en el 2007, por tres jóvenes actores que hacían comedias. entre marzo y abril de ese año.
La intención de hacer reír a la gente, no era suficiente; sino, se necesita más, donde haya un espacio para aportar la risa pura o sana. Entre la gran búsqueda de información se descubre la risoterapia.
"Se logra contactar una página de risoterapia en México. Un colectivo de Médicos Profesionales que la practican como parte de ayuda a los pacientes en hospitales, psiquiatrías", dice Castellan. " Se trata de contactar esta organización, pero, no se obtiene respuesta" señala.
Al no obtener respuesta, Fabrica de Sonrisas buscó a partir de la risoterapia, crear su propios medios. El primer paso es la visita a centros de Rehabilitación, hospitales, asilos, basureros y en lugares donde se necesita color.
"No visitamos la cárcel, en otros países se hace, siempre ha sido nuestra fortaleza, sin embargo, necesitamos más preparación"comenta el Doctor Narinas. "Podríamos llamarlo como un proyecto a largo plazo", asegura.
Al paso de los años, la asociación se va extendiendo en otros lugares, cuentan con una sede en El Salvador, con unos sesenta miembros. En Guatemala, se encuentran en Coatepeque, municipio de Quetzaltenango y el la cabecera departamental; Jalapa, Chiquimula, Cobán, al inicio de año el Zacapa y se esta terminando el proceso en Retalhuleu, y, la sede en la capital.
"Para la inclusión de cada miembro, tienen que pasar por proceso de seis meses, aquí en la capital y en el interior son de tres meses, se da esto por razones de gasto y cuando lanzan la segunda convocatoria en el interior ya es de seis mese por que la gente es del lugar" dice el doctor.
La influencia de las actividades de Fábrica de Sonrisas, en la personalidad de cada miembro, ha sido mágico. se basa en el servicio y que lo hace sentirse útil.
"Cada miembro para pasar los seis meses, recibe una capacitación en la Payescuela, es la preparación de las visitas no son cátedras de cómo hacer una visita", dice Narinas. "Sino, no puedes dar algo que no tienes", resalta.
Según el representante de Fabricas de Sonrisas, en el proceso de capacitación hay gastos que cubrir por las herramientas, batas, narices rojas y el carné, estos para cada miembro. Un porcentaje mínimo se queda para cubrir los gastos administrativos.
Para la realización de las actividades de la asociación, existe setenta grupos activos en el transcurso de la semana, Martes, Miércoles y Viernes se realizan visitas en la mañana y en la tarde, igual los fines de semanas; Sábado hay veinte grupos de quince a viente miembros y visitan diferentes lugares, visitan por tres semanas consecutivas y se cambian para evitar apego.
la participación de personas en este movimiento ha sido más por atracción y no por promoción. la primera visita fue en agosto. La expectativa era grande pero en el lugar de la visita fue un desafío, por las circunstancias, que se ve. "Hay personas que se unen al movimiento después de ser pacientes", dice Dennis Castellan.
Los miembros por protocolo, son mayores de dieciocho años, por que las actividades están calendarizadas para llevarse a cabo puntualmente.
Actualmente, cuentan con más de tres mil miembros ya que por generación llega una cantidad de gente que no se imagina.
Desde la cuarta generación se trasladó la convocatoria en el Parque la Democracia. Desde la octava generación se cuenta con Payescuela los domingos.
"Después de Ratalhuleu, nos vamos para Maryland, Estados Unidos, en junio, hay gente interesado allá. No podemos ir a cualquier parte, por que no están fácil" concluye Castellan.
Fotos:
www.fabricadesonrisas.org